¿QUÉ ES LA NEUROPSICOLOGÍA?
1. ¿Qué es y cómo podemos definir la neuropsicología?
En primer lugar, debemos aclarar que la neuropsicología es una ciencia perteneciente a la psicología, al contrario de lo que algunas personas piensan. Dentro de esta, la rama de la neuropsicología se dedica a estudiar la relación entre el cerebro y la conducta de las personas. El cerebro como tal es el encargado de producir las funciones cognitivas y emotivas del ser humano, así como del control de las actividades vitales más básicas como pueden ser el sueño, el hambre, o los movimientos. Por otra parte, cuando hablamos de conducta nos referimos a la manifestación que hacemos de los procesos cognitivos y emocionales a través de nuestro comportamiento.
Los neuropsicólogos, por tanto, estudiamos la relación existente entre las capacidades cognitivas y emocionales de un ser humano y la manifestación de estas y el comportamiento del mismo en el medio.
El estudio de esta relación puede hacerse desde el momento en que la persona nace, hasta el momento de su muerte. Pudiendo realizarse en cualquier momento de su ciclo vital y tanto en cerebros sanos, como en alteraciones del desarrollo o en procesos degenerativos.
2. ¿Qué es y a qué puede dedicarse un neuropsicólogo?
Un neuropsicólogo o neuropsicóloga será aquella persona que se encargue de estudiar y/o ejercer la neuropsicología, ya sea a nivel académico, clínico dentro de una consulta o de investigación.
Un neuropsicólogo que trabaja en la neuropsicología a nivel académico es aquel que se encarga de formar a otros compañeros, tanto en conceptos como en teorías que serán la base de su futura práctica, ya sea dentro de consulta como en investigación.
La persona que trabaja la neuropsicología dentro de la consulta es un neuropsicólogo clínico, y su desempeño de la materia se realiza en el trabajo directo con pacientes, ya sea en evaluación o en trabajo de intervención con los mismos. Por último, también puedes dedicarte a la neuropsicología desde el ámbito de la investigación; aquí hablaríamos de todos aquellos compañeros que se encargan de validar o comprobar datos o hipótesis que sustentan las teorías sobre las que el resto trabajamos.
Independientemente de su campo de actuación, un neuropsicólogo debe tener formación específica sobre las neurociencias, el desarrollo normal del cerebro, la psicopatología, técnicas de neuroimagen, etc.; así como formación reglada en psicología.
3. ¿Cuáles son los ámbitos de trabajo de la neuropsicología?
La neuropsicología y los neuropsicólogos podemos actuar en multitud de ámbitos; algunos de ellos pertenecientes al ámbito sanitario, otros al educativo, a los sociales o, tal como comentábamos, al ámbito de la investigación. En este artículo vamos a resumir los principales ámbitos en los que un profesional de la neuropsicología puede trabajar.
• Evaluación neuropsicológica.
Quizá uno de los ámbitos más conocidos y más trabajados por los profesionales de neuropsicología es este. Cuando realizamos una evaluación neuropsicológica usamos una serie de pruebas o test objetivos y estandarizados que nos ayudan a valorar diferentes áreas y poder delimitar las dificultades del paciente en cuestión. Algunas de estas áreas pueden ser: la resolución de problemas y capacidad de conceptualización, la planificación y organización, la atención, la memoria y el aprendizaje o incluso las habilidades académicas. Estas evaluaciones se recomiendan sobre todo cuando existe la sospecha de que un paciente, ya sea infantil, joven o adulto, pueda sufrir algún tipo de déficit relacionado con el cerebro y las funciones que este desempeña. Algunas de estas evaluaciones se dan cuando existe daño cerebral traumático, accidentes vasculares, dificultades de aprendizaje, trastornos por déficit de atención, trastornos neuropsiquiátricos, efectos de sustancias tóxicas y abuso de drogas o casos de sospecha de demencia, entre otros.
• Rehabilitación cognitiva.
En este caso y a diferencia de la evaluación, se interviene con el paciente haciendo un trabajo de rehabilitación de las funciones cognitivas mediante programas de intervención. Estos programas han de diseñarse por parte de un profesional de forma individualizada y específica para cada paciente, teniendo en cuenta características como la edad, tipo de déficit, áreas dañadas o funciones alteradas, entorno familiar y social, nivel de escolarización, etc.
• Prevención.
En el ámbito de la prevención de daño cerebral los neuropsicólogos pueden tener un papel muy importante mediante la propia participación en los programas de psicoeducación a la ciudadanía en los que se intenta informar para la prevención de actuaciones que puedan tener consecuencias a nivel cerebral. Algunas de estas campañas pueden ser las que solemos ver orientadas a la prevención de accidentes de tráfico, programas de prevención del consumo de drogas o campañas de promoción de la salud que tienen como objetivo evitar el riesgo de enfermedades vasculares cerebrales. Además, también y especialmente en los niños de riesgo biológico con mayores probabilidades de presentar disfunción cerebral y dificultades de aprendizaje se puede realizar un trabajo de prevención del fracaso escolar.
• Investigación.
Son varias las competencias que la Neuropsicología puede desarrollar en este apartado. La primera de ellas podría ser la creación, traducción o adaptación de pruebas neuropsicológicas ya existentes o nuevas, ampliando las actuales y facilitando por tanto que las evaluaciones neuropsicológicas sean lo más completas posibles. Este trabajo de creación o adaptación también puede realizarse con materiales orientados para los programas de rehabilitación cognitiva, desarrollando software específicos para tal fin. Además de esto, otro de los grandes trabajos que los neuropsicólogos especializados en investigación hacen es la observación de perfiles neuropsicológicos de diversas patologías relacionadas con el daño cerebral, con el objetivo de recoger toda la información posible sobre el desarrollo de patologías que ayuden a su tratamiento, prevención o rehabilitación.
• Orientación.
Uno de los papeles más importantes de los profesionales de la neuropsicología es la necesidad de realizar una adecuada orientación a personas, pacientes y familiares que puedan estar inmersos en cualquier proceso que implique afectación cognitiva; buscando solución a los problemas que, derivados de la lesión cerebral, pueden traer complicaciones a los pacientes o a los miembros de su familia.