Cualquier persona puede verse envuelta en una situación de crisis que la desborda y necesita ayuda psicológica urgente para evitar, por ejemplo, una desorganización psíquica grave, conductas impulsivas que pueden acarrear riesgos para la vida de otras personas y/o la propia, o estados graves de angustia.

Desde el Área Psicología Crisis, Emergencias y Catástrofes queremos ser esa primera respuesta de ayuda a la persona que está sufriendo, y necesita y pide asistencia inmediata.

El propósito fundamental es minimizar el impacto traumático de un suceso que aparece de repente, de forma muy intensa y que provoca una situación de crisis en la persona, haciendo necesario que  reciba ayuda de manera urgente para restablecer el equilibrio.

El objetivo es dotar al afectado de apoyo emocional, contenerle la angustia, informarle de los recursos comunitarios que tiene a su alcance y ofrecerle una vía adecuada para gestionar esa situación causante de su desequilibrio.